Hace más de 30 años, el presidente Brian K. Ashton — presidente de BYU–Pathway Worldwide — tenía un hermano menor que falleció. Aunque comprendía las verdades del Evangelio sobre lo que les sucede a los niños pequeños cuando fallecen, el presidente Ashton todavía tenía preguntas.
Estudió y oró, pero las respuestas parecían no llegar. Entonces, el año pasado, se le pidió que hablara en un servicio junto a la tumba de un niño fallecido.
“Fue entonces, mientras me preparaba para esa experiencia, que recibí las respuestas”, dijo el presidente Ashton en un video del devocional para los estudiantes y el personal de la universidad. “De hecho, me he dado cuenta que las respuestas a mis preguntas personales a menudo llegan cuando estoy sirviendo a otra persona”.
Debido a que Dios ama a Sus hijos — dijo la hermana Melinda Ashton, esposa del presidente Ashton — Él les da el Espíritu Santo para buscar respuestas y comprensión. “A veces tendremos que ser pacientes y tener fe porque Él sabe lo que es mejor para nuestro aprendizaje y crecimiento, pero las respuestas y el consuelo llegarán”.
El martes, 25 de abril, el presidente y la hermana Ashton enseñaron sobre la verdad en el primer devocional del semestre de primavera de BYU–Pathway. Sus mensajes se centraron en cómo encontrar la verdad en los tiempos confusos de hoy.
‘Acudir a Dios para saber la verdad’
El presidente de la universidad y su esposa a menudo ven a los estudiantes y otras personas confundidos sobre lo que es verdad.
“Escuchan una cosa de los profetas y apóstoles y otra cosa del mundo”, dijo el presidente Ashton. “Otros están paralizados por la complejidad de las decisiones que deben tomar. Aún así, otros escuchan o leen lo que se etiqueta como verdad, pero descubren que los supuestos expertos no están de acuerdo y, a menudo, tienen puntos de vista diametralmente opuestos”.
Esta es en parte la razón por la que el presidente de la Iglesia, Russell M. Nelson, advirtió que no sería posible sobrevivir espiritualmente sin la influencia constante del Espíritu Santo.
A pesar de los tiempos confusos de hoy, dijo el presidente Ashton, “la buena noticia es que hay una fuente de verdad en la que siempre se puede confiar: Dios el Padre; Su Hijo, Jesucristo; y el Espíritu Santo”.
¿Cómo se puede acceder a Ellos como fuente de verdad?
La hermana Ashton dijo: “Cada uno de nosotros tiene derecho a acudir a Dios para conocer la verdad. Él nos responderá en Su tiempo y a Su manera si le preguntamos con fe y con verdadera intención”.
Muchos, sin embargo, no acuden a Dios en busca de respuestas. “A veces no quieren saber lo que Él tiene que decir”, dijo. “Otros no se les ocurre preguntar. Y, aun así, a otros les falta fe en que Dios les responderá”.
‘El trabajo que debemos hacer’
Los Ashton compartieron videos del discurso de la conferencia del presidente Nelson de abril de 2018 “Revelación para la Iglesia, Revelación para nuestras vidas”. En este discurso, dijo la hermana Ashton, uno de los principales mensajes del profeta es “cada uno de nosotros puede conocer la verdad a través de la revelación”.
“Independientemente de lo que otros digan o hagan, nadie puede despojarlos del testimonio que les llegue al corazón y a la mente sobre lo que es verdadero”, dijo el presidente Nelson en el discurso.
“A medida que sigan siendo obedientes, expresando gratitud por cada bendición que el Señor les dé, y en tanto honren con paciencia el tiempo del Señor, se les dará el conocimiento y la comprensión que buscan”, dijo el profeta más tarde.
Estas citas y muchas otras muestran que “el gran Dios de los cielos, su Padre Celestial, quiere hablar con ustedes”, dijo el presidente Ashton. Entonces, ¿qué requiere Él de Sus hijos para que esto suceda?
La hermana Ashton describió cinco esfuerzos principales que los hijos de Dios deben emprender — “el trabajo que debemos hacer” para recibir Su revelación:
- Tener fe en Jesucristo.
- Vivir dignos de sentir y escuchar el Espíritu Santo.
- Escudriñar las Escrituras y las palabras de los profetas.
- Orar con fe para que Dios les responda.
- Esperar pacientemente la respuesta del Señor a Su manera y a Su tiempo.
A través de este modelo de cinco pasos, los estudiantes pueden dejar que Dios los dirija.
El presidente Ashton dijo, “¿Puede alguno de nosotros dudar que Dios nos revelará la verdad si estamos dispuestos a preguntar y luego hacer el trabajo requerido para recibir revelación?”.
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